La Música y la Meditación

En el Centro de Meditación Sri Chinmoy, la música espiritual juega un papel muy importante. Sri Chinmoy compuso más de 13,000 canciones devocionales en su idioma natal, el Bengalí, además de más de 7,000 en inglés, y las mismas son fuente de gran inspiración para sus estudiantes.

Hay veces que el aspirante no logra entrar en una meditación profunda. La música es de gran ayuda; el cantar o tocar una melodía espiritual eleva la conciencia del aspirante, facilitando la oración y la meditación.

"La música es el lenguaje interior o universal de Dios. Yo no sé francés o alemán o italiano. Pero si se ejecuta música, inmediatamente el corazón de la música penetra en mi corazón, o mi corazón penetra en la música. En ese momento, no necesitamos comunicación externa; la comunión interna del corazón es suficiente. Mi corazón está en comunión con el corazón de la música y en nuestra comunión nos volvemos inseparablemente uno.
En el mundo espiritual, a la meditación le sigue la música, el respiro de la música. La meditación es silencio, energizante y colmador. El silencio es la expresión elocuente de lo inexpresable. Aldous Huxley dice: “Después del silencio, lo que viene más cercano a expresar lo inexpresable es la música.”
El silencio es la fuente de todas las cosas. Es la fuente de la música y es la música misma. El silencio es la música más profunda, más satisfactoria del Supremo (Dios). El silencio es como una corriente que se dirige a un lugar y llega a ser un río, o se dirige a otro lugar y llega a ser un arroyo, o el mar donde está totalmente expandida.
El silencio es el nido y la música es el ave. El ave deja el nido temprano en la mañana y retorna al nido en el atardecer. De manera similar, en el mundo espiritual, la música divina proviene del alma más recóndita del silencio."

Como músico ejecutante, Sri Chinmoy ofreció más de 700 conciertos de música meditativa entre el 1984 y el 2007. Muchos de estos conciertos fueron ofrecidos en salas de renombre internacional: Carnegie Hall, Sydney Opera house, Royal Albert Hall y muchas otras. Todos estos conceirtos fueron ofrecidos gratuitamente, como un servicio a la humanidad aspirante. Esta es música que va de corazón a corazón, una paz compartida en forma de poema y canción. La música espiritual tiene la capacidad de elevar el alma a lo Altísimo:

"Después de la plegaria profunda o de la meditación, la música es de capital importancia. La meditación es como una ruta directa, un atajo, hacia la meta. La música es un camino que es absolutamente despejado: puede que sea un poco más largo, pero está completamente despejado de obstáculos. Si podemos tocar música del alma u oír música del alma, el poder de nuestra meditación aumenta. La música del alma suma a nuestra aspiración. De manera similar, si un buscador espiritual quiere ser un músico, aunque no tenga formación musical previa, será capaz de ser un buen músico porque la plegaria y la meditación contienen todas las capacidades. Tal vez nunca hayas estudiado música, pero si rezas y meditas con toda el alma, entonces dentro de tu plegaria, dentro de tu meditación, por la Gracia del Supremo, reina el poder de la música. Luego puedes utilizar este poder a tu propia manera."

Por lo tanto, muchos centros de meditación Sri Chinmoy alrededor del mundo cuentan con coros y/o grupos instrumentales. Estos conjuntos cantan y tocan música espiritual en las meditaciones grupales, en las clases de meditación que se ofrecen al público, y en conciertos de música meditativa. Los miembros de los centros de meditación Sri Chinmoy utilizan la música, y específicamente el cantar canciones espirituales, como parte de su práctica diaria de meditación.